Retrato de medio cuerpo de tres hombres con sombreros. En la parte posterior no hay ninguna descripción. Se puede reconocer a Jorge Machicado Silva en el centro. Existen 2 copias.
Posando dos adultos junto a un niño. Jorge Machicado Silva se encuentra al centro sentado en una silla. Al lado derecho se ubica su hijo Flavio Machicado Viscarra.
Contiene recibos de pago por servicios, cuotas, cheques,entregas y deudas de dinero. Las facturas son de diversos productos: trajes, materiales de imprenta, comida, bebidas, transporte y otros tipos.
Se separo las notas de pago sobre colegios y educación.
Contiene documentos financieros de compra y venta, junto a recibos, pagarés y otros relacionados al ejercicio minero, por ejemplo pago de arrieros, compra de llamas y otros.
Recibos de:
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Varios personajes (1899/1936);
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Familia Viscarra (1902/1937);
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Julio, Teodoro y Raquel y Guillermina Machicado (1905/1914);
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Juan Tapia (1906/1910);
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Catalina Aviles viuda de Luizaga (1911/1921);
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Elvira Dick (1913/1937);
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José R. Rocha (1913);
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Jacobo Claros (1930/1932);
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Jesús Dávalos (1932/1933);
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José García Calderón (1933);
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J. M. Rodríguez (1935/1936).
Conformado por recibos de pago referentes a la compra de la finca Ananta por Cecilio Calli a Candelaria L. viuda de Porcel. Se añaden recibos de Cecilio Calli anteriores a la compra de Ananta que pueden explicar mejor la relación que mantenía con Jorge Machicado Silva, que actúa como mediador en la compra.
Recibo por la venta de terrenos en Taraco efectuada por Juan y Casimiro Tapia a Jorge Machicado.
Cuenta corriente del Presbitero de Jesús Viscarra, contiene <i>"debe y haber"</i>, se menciona los nombres de Jorge Machicado Silva y Rosa Machicado.
Se adjunta al final un grupo de cartas y cuentas con Daría de Cornejo (1906/1936) y con Lorenzo Roriguez (1932).
Testimonio de la escritura de ratificación del contrato de venta entre Jose Cachicatari y Jorge Machicado de la cuarta parte de un terreno ubicado en la finca Ocorani.
Sumario criminal respectivo por Jorge Machicado <i>"...hemos sido víctimas del delito de estafa y engaño perpetrado por el arriero Nicanor Salamanca, quién con muchos artificios ha sonsacado la suma de un mil cien bolivianos en efectivo..."</i>.